sábado, 8 de octubre de 2011

La Roma de Bernini

El arquitecto de Dios

Bernini-13 Vista desde la cúpula de S. Pedro, la columnata de Bernini 

Como todos los viajeros a la ciudad eterna, tuvimos ocasión de sorprendernos y admirar las grandes obras de Gian Lorenzo Bernini que realzan la ciudad. El primer viaje a Roma (2005) nos llevó, inicialmente, a conocer las más importantes. Dos visitas  más, a buscarlas expresamente en El Vaticano,  o recorriendo sus calles y plazas donde encontramos palacios, fuentes y esculturas producidas o diseñadas por el genial artista. Queda el recuerdo de 2.000 fotografías de la ciudad de las que entresaco algunas para este post.

Bernini -uno de los maestros del Barroco- nació en Nápoles en 1598. Su padre, Pietro, era escultor y trabajó a partir de 1605 en Roma bajo la protección del cardenal Scipione Cafarelli-Borghese. Inició en el oficio a su hijo y pronto se presentó la ocasión de mostrar su talento. En su adolescencia realizó obras que imitaban a la perfección el estilo antiguo.
Alcanzó la fama con 23 años, entre 1621 y 1625 cuando esculpió cuatro esculturas que llevaron a los expertos a considerarlo un gran maestro. Encargadas por Borghese se pueden admirar hoy día en la Galería del mismo nombre.

Bernini-22 Villa Borghese

Estas obras - Eneas, Anquises y Ascanio; el rapto de Proserpina; David y Apolo y Dafne - son obras maestras que marcaron una nueva dirección en su carrera artística.

Imprescindible la visita a  la Galería Borghese, una de las mejores colecciones que se han acumulado en la historia del arte. Su sola Elefantino-2visita justificaría un viaje a Roma, no hay otra colección de escultura que le haga sombra.

La entrada al museo es siempre con reserva previa, siendo conveniente hacerla con antelación a la fecha y hora deseada para no encontrarnos con la desagradable y frecuente sorpresa de que no hay plazas durante nuestra estancia en Roma. (Horario de martes a domingo de 8,30 a 19,30. Turnos de 2 horas para un máx. de 360 personas. Reserva obligatoria. Precio: 8,50€. No hay fotos, en las salas está prohibido fotografiar o filmar)

 Obelisco. Piazza S. María sopra Minerva

Recibió Bernini  encargos de todo tipo que dejaron su huella en la ciudad. En la Piazza della Minerva encontramos el “elefantino”, diseñado para dar soporte a un obelisco egipcio encontrado en el jardín del monasterio y que los monjes quisieron instalar delante de la iglesia.

El Papa Clemente IX (Giulio Rospigliosi 1667-1669) requirió al genio para adornar el puente más bonito de Roma: Sant’Angelo.

SAngelo-1 Puente de Sant’Angelo

SAngelo-2 Había sido construido en el año 134 d.C. por Adriano como acceso a su mausoleo y debía adornarlo con una nueva balaustrada y diez ángeles que mostraran los elementos de la pasión de Cristo, a modo de vía crucis que guiara a los peregrinos hacia la basílica de San Pedro. De las 10 sólo dos salieron de la mano de Bernini, el ángel con la corona de espinas y el que lleva la inscripción de la cruz. Tanto le agradaron al Papa que ordenó su sustitución por copias. Los originales están en San Andrea del Fratte.

En el transcurso de su vida Bernini fue uno de los artistas preferidos de 7 Papas, si bien recibió los encargos más importantes de Urbano VIII, Inocencio X y Alejandro VII.


Urbano VIII (1623-1644)
Maffeo Barberini fue elegido Papa en 1623. Gran admirador de Bernini, hombre ambicioso y amante del arte consideraba al artista el hombre ideal para llevar a cabBernini-9o sus grandes proyectos urbanísticos y arquitectónicos. No dudó en nombrarlo "el arquitecto de Dios".

Como sus antecesores practicó el nepotismo nombrando cardenales, al poco tiempo de ser elegido, a un hermano y tres sobrinos.

En esta etapa comienza Bernini a trabajar en la Basílica de San Pedro, el Pontífice le encarga el diseño del baldaquino de bronce -construido entre 1624 y 1633-. Durante 50 años será el arquitecto de S. Pedro.

S. Pedro del Vaticano. Baldaquino.

Como sucede muchas veces a lo largo de la historia de la ciudad "se desvistió un santo para vestir otro". El Panteón, una de las grandes obras de la antigua Roma fue el donante de las placas de bronce que, hasta entonces, revestían su cúpula.

Su manera de actuar hizo que el pueblo romano le dedicara una celebre sentencia: "quod non fecerunt barbari, fecerunt Barberini" (Lo que no hicieron los bárbaros, lo hicieron los Barberini).

 

Bernini-17 Palacio Barberini

Otro sobresaliente encargo del Pontífice fue el palacio Barberini. Se inició su construcción en 1630 y en él contó con la colaboración de Borromini, autor del diseño de laEscalera-1 escalera oval. Con el transcurso de los años se convirtió en su gran rival, con el que mantuvo frecuentes disputas artísticas.

 Palacio Barberini. Escalera oval

El edificio es una de las sedes de la Galleria Nazionale d'Arte Antica. El Palacio conserva importantes frescos y varias pinturas catalogadas como obras maestras universales. El celebre retrato de "La Fornarina" pintado por Rafael, o el Caravaggio "Judith decapitando a Holofernes" entre ellas, y obras de grandes maestros como El Greco, Tintoretto, Bronzino, Filippo Lippi, Poussin o Hans Holbein. Info del Palacio Barberini. (Horario de martes a domingo de 8,30 a 19. Entrada 5€). Al igual que en la Galería no es posible obtener imágenes en las salas)
Bernini-6Merece la pena acercarse a la Vía Barberini, 184; calle que parte de la Plaza del mismo nombre y donde nos detenemos a admirar otra de las fuentes de Bernini: La Fontana del Tritone.

No falta el símbolo papal que identifica a la familia Barberini, las abejas, que también abundan en las paredes del Palacio. En este caso sobre la cola de los delfines.

En 1627 Urbano VIII encargó a su padre, Pietro Bernini, la construcción de una fuente en la Plaza de España. El encargo tenia cierta dificultad técnica por la poco presión que traía el agua. Los Bernini salvaron el escollo situando el vaso de la fuente a un nivel más bajo que el suelo.

Bernini-7 Fontana de la Barcaccia. Plaza de España.

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S. Pedro del Vaticano. Sepulcro de Urbano VIII

En 1628 diseño el mausoleo del Papa, para colocarlo en uno de los nichos de la Basílica de San Pedro.  Simétrico al de Pablo III el Papa del Concilio de Trento. La obra se inspiró en la tumba de los Medicis de Miguel Ángel. Es un poco complicado apreciarlo en la Basílica pues esta situado en una zona sin acceso.


Inocencio X (1644-1655)
Giambattista Pamphili se vio obligado a llevar un papado mucho más austero por la crisis económica de los Estados Pontificios. En esta etapa Bernini sufrió alguno de los más importantes reveses de su carrera. En 1644 se vio obligado a demoler el campanario y la fachada de la Basílica de San Pedro por falta de estabilidad. Acusado de incompetencia técnica consiguió que el Papa mantuviera su apoyo, a pesar del ascenso de grandes artistas rivales como Francesco Borromini.  Bernini-27

Piazza Navona. Fuentes del Fauno y los Cuatro Ríos

Realizó una de sus grandes obras maestras: el éxtasis de Santa Teresa, y asombró a los romanos con la famosa fuente de los Cuatro Ríos (1647), visita indispensable en la Piazza Navona.

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Bernini-25Bernini-26   Bernini-23

Fuente de los Cuatro Ríos. Detalle

El centro de la monumental fuente es una roca artificial, en sus cuatro esquinas descansan las personificaciones de los cuatro grandes ríos que se conocían en esa época –Nilo, Ganges, Danubio y Río de la Plata- rodeados de animales y plantas. Sobre esa composición un antiguo obelisco romano, expuesto en sus tiempos por Domiciano en el templo de Isis.


Alejandro VII (1655-1667)
Fabio Chigi emprende ambiciosos proyectos urbanísticos. En la Basílica de San Pedro se termina la decoración del interior y se construye la columnata elíptica que representa el abrazo de la iglesia a todo el pueblo.

 Bernini-1Bernini-2
Entre el obelisco y cada fuente de la Plaza están las dos marcas que indican el centro de la columnata elíptica. Desde ellas las cuatro filas se ven como una única columna.

San Pedro

La plaza de S. Pedro y la ciudad, desde la cúpula

Uno de sus últimos trabajo será el sepulcro de Alejandro VII. Obra espectacular espacialmente, situada sobre la puerta de una de las sacristías de S. Pedro, cubierta por los pliegues de mármol que dan soporte a la composición. Todo un escenario para una de las mejores representaciones de la teatralidad y efectismo de la escultura barroca

Bernini-10S. Pedro del Vaticano.  Mausoleo de Alejandro VII

Bernini era un artista de fama internacional, en 1665 el rey Luis XIV convenció al Papa para llevarlo a París con el encargo de reestructurar el palacio del Louvre. Su estilo no acabó de convencer a los franceses y tras una estancia de 6 meses regresó a Roma. 

Bernini-21Santa María Maggiore

Falleció en la ciudad a  la edad de 81 años. Fue enterrado en la Basílica de Santa María Maggiore, la misma iglesia donde, de niño y en el taller de su padre, aprendió a dar vida al mármol. Su genialidad sorprendió a sus coetáneos y su tumba sorprende a los viajeros, pasa desapercibida si no conoces su ubicación.

El hombre que engrandeció la ciudad con impactantes diseños arquitectónicos, esculturas prodigiosas y fuentes monumentales, descansa bajo un peldaño que separa la nave derecha y la central  de la basílica. Una sencilla inscripción advierte del lugar. “Gian Lorenzo Bernini. Gloria de la ciudad y las artes reposa humildemente”

Bernini-19 Sta. María Maggiore. Tumba de Bernini

2 comentarios:

  1. Toda un lección de arte ilustrada con magníficas fotografías.
    Ya me gustaría cruzar hasta Barcelona y coger el ferry hasta Génova para llegar a Roma y Florencia. Haber si algún día....
    Nuestras felicitaciones por tane xtraordinaria entrada que disfrutamos enormemente

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  2. No sería mal plan, pues supongo que lo quieres hacer en moto.
    Dificulta el tema que ciudades como Florencia y Roma tiene el tráfico restringuido por el centro. Aunque lo peor es Roma donde conducen respondiendo a la fama que tienen, hay miles de motos y van como locos, los coches parecido. Hay sitios donde para cruzar un paso de peatones conviene hacerse un seguro de vida. No paran, directamente te esquivan, así que nada de hacer amagos...

    Donde sí sería una maravilla pasear en moto es por la Toscana, lo recorrí en coche. Fuera de las grandes vías de circulación hay muchas carreteras estrechas con poco tráfico, curvas, subidas y bajadas que transcurren por un paisaje único, las colinas típicas que se ven en las pelis.
    Saludos,

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